Momentos 1

 Inverbalizados eran los momentos, candescentes, galvanizados y sabanísticos.

Ella corría hacia su Amo, fugitiva, furtiva, acelerada y lasciva, solo con una máscara negra de pestañas, engorrosa y empalagosa para llorar, pero chorreosa en demostrar respeto inmaculado y maculo.

Paraíso indecente era el tálamo bendito y la alfombra de granito donde se arrastraba a cuatro patas.

La boca chorreo babas en aquella silueta que asomaba entre el pantalón estrecho.

Entre choca su boca con la piel suave del prepucio perverso y de reojo mira si aquel siente, arremete su cabeza contra el miembro. Y en un segundo corrimientos sin esfuerzos, la esperanza de algo más se evapora como el calor de lo servido en la boca, sin carne, sin aire, desnuda...busca algo más..

Nunca es suficiente. 

Anne MR

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